Testimonios

Acompañamiento durante el embarazo

“Nuestra doula nos ayudó mucho, tanto a mi esposo como a mi. Nos permitió resolver muchas dudas, entender lo que iba a pasar y nos tranquilizó.”

“Una doula es alguien que te acompaña, aclara tus dudas y en quien te puedes apoyar. Junto con mi doula hablamos de qué era lo que quería para mi parto, qué cosas podían suceder y cómo manejarlas. A diferencia del doctor, es ella a la que le puedes hacer todas esas preguntas “tontas” que el doctor seguramente si lo llamaras te diría: ¿mamita para eso me llamas?”.

“El proceso de preparación para mi parto fue difícil; una lucha mensual con el doctor, mi pareja y la clínica. En una sociedad como la nuestra donde el poder de la mujer para dar a luz está ninguneado y donde parir se ha convertido en un procedimiento quirúrgico, una doula se convierte en un gran apoyo y seguridad.”

“Mi doula me ayudó a calmar las dudas sobre mi parto, entender un poco mas mis miedos y conocer cómo funcionaría el sistema médico.”

“Durante el embarazo nuestra doula nos ayudó a conocer diferentes aspectos del proceso que íbamos a vivir. Gracias a su ayuda supimos qué preguntarle al médico para tener más control en el nacimiento de nuestra hija y tomar decisiones que de lo contrario hubieran sido tomadas por el doctor.”

“Tener el acompañamiento de una doula durante el embarazo me brindó seguridad. Su apoyo fue básico para reafirmar el parto que quería. Su trato cercano y sencillez fueron fundamentales para tener un embarazo pleno.”

 

panza1

Acompañamiento al parto

“Esa simple presencia, la seguridad que nuestra doula nos daba que todo iba a salir bien, que yo podía dar a luz a nuestro primer bebe sin medicación y sin largo sufrimiento no me dejó dudar de mi, me permitió confiar en mi instinto y me ayudó mucho a no frenar mi trabajo de parto a la llegada a la clínica. Un ambiente que percibí algo frío, nada parecido a lo que quería para la llegada de nuestro bebe.”

“El día del parto la ayuda de mi doula fue mucho más de lo que esperábamos. Me dio la confianza que yo necesité para poder llevar el proceso con calma y aceptar el dolor. Cuando entraba la obstetriz y el doctor nos decían cuánto había avanzado el parto y se iban, ella era quien nos traducía si el avance era bueno o no. Por los nervios, yo me desconcentraba y empezaba a hablar de cualquier cosa, ella me traía nuevamente a la tierra y el parto avanzaba más y mejor.”

“Trabajar con una doula fue un éxito. Siempre había pensado en trabajar con una doula pero cuando llegué a Lima no sabía si sería posible. Encontrarte fue indispensable, no sólo para el apoyo emocional, pero también para entender la logística y opciones aquí en Lima.”

“Durante el parto entre tanta movilización médica, una mano amiga que me dijera que todo iba bien, armó el equilibrio en un momento de tanta incertidumbre.”

“Debido a mi presión alta el médico aconsejó inducir el parto. Mi doula me acompañó desde mi entrada al hospital y me iba explicando los procedimientos que las enfermeras iban realizando. También me tranquilizaba cuando alguna hacía un comentario fuera de lugar que, en una situación tan vulnerable, puede ponerte muy nerviosa.”

“Luego de 7 horas de trabajo de parto me hicieron una cesárea “necesaria”, mi doula me acompañó en el proceso de aceptar la cesárea y prepararme para recibir con el mejor ánimo a mi bebe. Su presencia fue tranquilizadora porque es mujer, porque ya había vivido la experiencia de parir y porque principalmente, estaba plenamente informada, me condujo de la mano a tener una experiencia maravillosa.”

“Yo estaba súper ansiosa los días antes de cumplir 40 semanas, habían días en los que sentía miedo y dudaba de mi capacidad para tener un parto natural, llamaba a mi doula y ella tenía las palabras exactas y me tranquilizaba y así volvía a tener confianza en lo que podía hacer.”

 

parto-natural

 

Acompañamiento durante el Postparto/lactancia

“Los días siguientes al parto estaban llenos de dudas sobre la lactancia, nuestra doula nos ayudó dándonos confianza y nos hizo ver que todo lo que sentíamos y todas las dudas que teníamos eran más comunes de lo que pensábamos.”

“El secreto de una lactancia exitosa es la informacion, todo lo demas va fluyendo. Haber tenido a mi lado a una asesora de lactancia fue vital, no es fácil pero tampoco imposible. Gracias, mi bebe y yo te lo agradeceremos por siempre. Me saqué el clavo de una lactancia exitosa gracias a ti.”

“En su primera cita con el pediatra, Vicente sólo había subido 60 gramos, muy por debajo de lo esperado. Me dijo que estaba dándole poca leche y que por eso no había engordado. En realidad fue un momento muy desesperante. Me sentí muy mal, inútil, culpable. Soy madre primeriza y era (creo que sigo siendo) demasiado sensible a todo aquello que pueda afectar a Vicente, más si se debe a mi inexperiencia. Felizmente a Diego se le ocurrió contactar a una asesora de lactancia. Vino, conversamos y me dio mucha seguridad y confianza desde el comienzo. Me sentí muy fortalecida. Sus recomendaciones fueron muy claras y ciertas. Lo mejor de todo es que sentí que me hablaba con la verdad. Me ayudo a sentirme bien y segura de que Vicente iba a lograr tomar leche sin parar y fue tal cual. Luego de un mes, Vicente subió todo lo que tenía que subir de peso. Hoy es un bebé grandote de 8 meses y 10 kilos, feliz y juguetón gracias a mi leche y sobre todo a la seguridad y confianza que ella me dio para lograrlo.”

“Su apoyo en el tema de la lactancia fue fundamental. Haciendo oídos sordos a los consejos de las enfermeras de darle fórmula a mi hija porque me salía muy poco calostro, me apoyé en ella y al día siguiente mi hija ya estaba prendida a mi pecho succionando de forma perfectamente natural. Gracias.”

“Gracias por apoyarme en los peores momentos donde estuve al borde de tirar la toalla, gracias por el acceso a la información valiosa que me guío en esta linda aventura, gracias por hacerme sentir que no era la única, ni que estaba sola en este proceso difícil pero a la vez hermoso. Gracias por hacerme sentir que mi dolor inicial y mis preocupaciones no eran exageradas, gracias por las palabras de aliento, el cariño y por estar ahi lo que fuera necesario! Hoy disfruto mi lactancia, la cual continuaré hasta que, tanto mi hijo como yo, lo decidamos.”

“Mi experiencia con la lactacia fue difícil al inicio, he pasado por varias mastitis y obstrucciones que dificultaron dar el pecho a mi primer hijo. Cuando nació mi segundo hijo mi asesora me ayudó a recordar que dar de lactar es una de las expresiones máximas de amor y que deben entenderse en su manera más pura, sin contaminación de la vida moderna ni de aparatos que nos “ayuden”. Leí mucho sobre el tema de lactancia, quería que mi segunda experiencia fuera mejor que la primera, pero en este camino perdí de vista la principal motivación de dar el pecho: disfrutar de la conexión con tu bebe y de la satisfacción de una carita embotada de leche materna. Tuve obstrucciones nuevamente pero gracias a la conexión con mi bebe y a la ayuda de mi asesora, mantuve la seguridad que haríamos lo que la naturaleza nos manda: dar el pecho a demanda, sin horarios y el tiempo que ellos lo deseen.”

“Mi doula me ayudó a reafirmar mi decisión de darle a mi bebé lactancia exclusiva. Ella me dió muchos consejos para realizar la lactancia de la mejor manera. Actualmente le sigo dando lactancia exclusiva a mi bebé y estoy feliz, es sacrificado pero el saber que está creciendo segura y amada lo vale todo.”
Acompañamiento al parto

“Esa simple presencia, la seguridad que nuestra doula nos daba que todo iba a salir bien, que yo podía dar a luz a nuestro primer bebe sin medicación y sin largo sufrimiento no me dejó dudar de mi, me permitió confiar en mi instinto y me ayudó mucho a no frenar mi trabajo de parto a la llegada a la clínica. Un ambiente que percibí algo frío, nada parecido a lo que quería para la llegada de nuestro bebe.”

“El día del parto la ayuda de mi doula fue mucho más de lo que esperábamos. Me dio la confianza que yo necesité para poder llevar el proceso con calma y aceptar el dolor. Cuando entraba la obstetriz y el doctor nos decían cuánto había avanzado el parto y se iban, ella era quien nos traducía si el avance era bueno o no. Por los nervios, yo me desconcentraba y empezaba a hablar de cualquier cosa, ella me traía nuevamente a la tierra y el parto avanzaba más y mejor.”

“Trabajar con una doula fue un éxito. Siempre había pensado en trabajar con una doula pero cuando llegué a Lima no sabía si sería posible. Encontrarte fue indispensable, no sólo para el apoyo emocional, pero también para entender la logística y opciones aquí en Lima.”

“Durante el parto entre tanta movilización médica, una mano amiga que me dijera que todo iba bien, armó el equilibrio en un momento de tanta incertidumbre.”

“Debido a mi presión alta el médico aconsejó inducir el parto. Mi doula me acompañó desde mi entrada al hospital y me iba explicando los procedimientos que las enfermeras iban realizando. También me tranquilizaba cuando alguna hacía un comentario fuera de lugar que, en una situación tan vulnerable, puede ponerte muy nerviosa.”

“Luego de 7 horas de trabajo de parto me hicieron una cesárea “necesaria”, mi doula me acompañó en el proceso de aceptar la cesárea y prepararme para recibir con el mejor ánimo a mi bebe. Su presencia fue tranquilizadora porque es mujer, porque ya había vivido la experiencia de parir y porque principalmente, estaba plenamente informada, me condujo de la mano a tener una experiencia maravillosa.”

“Yo estaba súper ansiosa los días antes de cumplir 40 semanas, habían días en los que sentía miedo y dudaba de mi capacidad para tener un parto natural, llamaba a mi doula y ella tenía las palabras exactas y me tranquilizaba y así volvía a tener confianza en lo que podía hacer.”

 

teta3

Leave a comment